Tus miedos y los mios

Tanto silencio hubo el día que por un encuentro casual, buscado, deseado con dolor, te vi en esa cama del hospital. Una tarde que no podré olvidar, sobre todo porque fue la tarde del encuentro. Un final que se anunciaba en esos ojos hermosos color miel, con tanto miedo como el que yo tenía. Cómo el azar pacta con el dolor,con el infinito de saber que ya no te tendría cerca, que pasarías en breve a formar parte de mis mayores secretos de amor guardados en dos fotos y un armado de historias que no sabré si fueron ciertas. De ese abrazo único que recuerdo y conservo en mi espalda un invierno frío de agosto. Esa sombra de amor que la suerte quiso que tocara, velando al lado de tu cama, cuando perdido ya de dolor trataba de ayudarte a partir sin miedo. Estarás en mí con cada partida hasta que el encuentro se haga cierto y podamos darnos todas las respuestas. Al viejo. Al que aprendí a querer de grande. Germán Hess - 2012